
Como viejo aficionado a los videojuegos de Final Fantasy, es normal que me haya emocionado ante la perspectiva de una nueva entrega de la serie, sobre todo en vísperas de su lanzamiento. Sin embargo, con los títulos más recientes de la franquicia me he visto envuelto en largos debates sobre qué son y a quién están dirigidos. ¿Son para los amantes de los antiguos juegos por turnos con los que crecimos? Pues la verdad es que no. La saga Final Fantasy se ha ido alejando de este concepto en la última década. Seguro que la narrativa y la construcción del mundo son increíbles, es un juego de Final Fantasy. Cierto, pero algunas de las iteraciones más recientes han sido un poco más divisivas en ese sentido, sobre todo entre los fans más veteranos.
Debo destacar, entre los innumerables lanzamientos que ha habido desde Final Fantasy X (seguramente el mejor de este siglo XXI), que Final Fantasy VII Remake come aparte. En primer lugar porque no lo podemos considerar un lanzamiento «principal», aunque sí lo sea. Y en segundo lugar, el hecho de que haya sido ampliado y dividido en una trilogía comporta que debamos analizarlo en detalle una vez ésta haya sido completada, pues muchas sorpresas y debates están todavía por venir.
¿Y qué os puedo decir de Final Fantasy XVI? ¿Qué opino al respecto? ¿Recomendaría el juego? En una sola palabra: SÍ. Final Fantasy XVI es maravilloso. No sólo para los fans de la franquicia, sino también para los aficionados a los RPG de acción y, en general, de los JRPG.
Una de las mejores historias de la saga Final Fantasy
La historia y el mundo ficticio de Final Fantasy XVI son realistas, impresionantes y convincentes. Como jugador al que le atraen los juegos con una buena narrativa, el título hace su trabajo metiéndome de lleno en la trama, enamorándome de los personajes y grabándose en mi mente incluso cuando no lo estoy jugando, dejándome con ganas de volver a por más. Por eso son conocidos los juegos de Final Fantasy. Por ofrecer una historia sólida dentro de un mundo cohesionado. Final Fantasy XVI no es una excepción, y Creative Business Unit III y Square Enix lo han conseguido.
Además, rompe con todo lo establecido anteriormente en la saga. Ese PEGI 18 que podemos vislumbrar en la portada ya es toda una declaración de intenciones, pues seguramente sea el título más adulto visualmente que hayamos visto de entre todos los que han sido lanzados desde 1987. Nos encontramos ante un mundo estríctamente occidentalizado, llevado hasta el punto de que parece que HBO haya estado al mando de la producción y estemos viendo una de las temporadas de Juego de Tronos. Sí, hay mucha violencia, sangre y sexo, aunque en pequeñas dosis en este caso.

Final Fantasy XVI está ambientado en una época medieval dentro del territorio de Valisthea, dividida en dos continentes, Ceniza y Tormenta. La tierra está «bendecida» con Cristales Madre que proporcionan magia y energía a la gente, impulsando la civilización a través del poder del Éter. En la actualidad, la nación está dividida en seis reinos que luchan por hacerse con el control de sus respectivos Cristales Madre, cada uno con diferentes objetivos de mantener la alianza, conquistar y sobrevivir a la corrupción del Tizón, una misteriosa plaga que sigue amenazando y destruyendo Valisthea.
Los componentes clave de la historia giran en gran medida en torno a los aspectos políticos de los distintos reinos, su ejército, sus líderes y los Dominantes: humanos que han sido elegidos como anfitriones de los distintos Eikons elementales. Estos Dominantes pueden utilizar la magia sin los cristales y pueden transformarse en sus respectivos Eikons, lo que los convierte en las armas definitivas utilizadas en la guerra. Sin embargo, el uso excesivo de sus dones puede tener graves consecuencias para sus vidas y, en última instancia, provocarles la muerte.
La trama sigue la historia del protagonista, Clive Rosfield, el hijo primogénito del archiduque del Gran Ducado de Rosaria. También es el dedicado «Escudo» de su hermano menor y sucesor al trono, Joshua Rosfield, que resulta ser el Dominante del Eikon de Fuego, Fénix. A medida que asistimos a la vida de Clive en su adolescencia, se desarrollan una serie de desafortunados acontecimientos. El Gran Ducado de Rosaria cae, surge una batalla entre dos Eikons y una tragedia se abate sobre los hermanos Rosfield, lo que pone a Clive en el camino de la venganza.
A lo largo de tu viaje como Clive, experimentarás las diferentes fases de su vida y aprenderás más sobre el lore del juego a través de la progresión de la historia, las interacciones con diferentes NPCs, las misiones secundarias y una característica única del juego, el ATL o Active Time Lore. Lo descubriréis en cuanto os adentréis más, pero digamos que hay un personaje secundario que nos va poniendo al día de toda la trama.
Final Fantasy XVI tiene un tono más oscuro, cosa que ya hemos destacado, y la verdad es que se agradece. Puede que no sea como estamos acostumbrados a un videojuego tradicional de Final Fantasy, pero para esta entrega, la inspiración en Juego de Tronos y el ambiente más descarnado parecen funcionar. Los videojuegos son otra forma de contar historias y, en general, la trama y la ambientación de este juego están entre sus puntos fuertes. Combinadas con un doblaje soberbio y un guión bien escrito, dejarán boquiabiertos tanto a los fans nuevos como a los veteranos de la serie Final Fantasy. Un consejo: puede que quieras tener un paquete de pañuelos a tu lado.
Un Gameplay con mucho que decir
Cuando me senté a jugar para escribir este análisis, me preocupaba que el ritmo me ralentizara y acabara aburriéndome, ya que hay muchas escenas y diálogos, sobre todo en el prólogo. Sin embargo, gracias a la paciencia y al hecho de que el juego empieza con fuerza, no fui consciente de la cantidad de tiempo que pasé jugando y de lo atraído que me sentí a medida que la tensión de la historia empezaba a aumentar. A medida que avanzaba, fui descubriendo más mecánicas de juego. Sí, puede ser lento durante el prólogo, pero enseguida se abre más una vez que empiezas en el presente, y hay una generosa cantidad de contenido en lo que se refiere a las características clave y las mecánicas de combate del juego. Hablemos un poco más de ello.
La exploración
Quisiera aclarar, por si acaso, que Final Fantasy XVI no es un juego de mundo abierto, y esto podría dividir a los jugadores, ya que la ambientación de mundo abierto ya se hizo en Final Fantasy XV. Entonces, ¿por qué no hacerlo posible aquí? Sinceramente, no hace falta que lo sea para esta entrega. Me recuerda a los juegos clásicos de Final Fantasy, y da la sensación de que los desarrolladores decidieron «volver a sus raíces», lo cual funciona de maravilla para este título. En Final Fantasy XVI, la progresión de la historia te permitirá explorar distintos lugares. Accederás al mapa del mundo y, a partir de ahí, tendrás cierta libertad para viajar a distintas zonas, siempre que estén desbloqueadas y se pueda acceder a ellas durante ciertas partes de la historia principal.
Los lugares que exploras están divididos en secciones y son en su mayoría lineales, partiendo del Punto A y llegando finalmente al Punto B, que es tu objetivo. A medida que atraviesas estas zonas, como bosques, ruinas, asentamientos, el desierto, etc., te encontrarás con enemigos que van desde bestias a humanos, pasando por la flora y la fauna. Descubrirás distintos botines y lucharás contra jefes. Algunas zonas pueden parecer grandes en términos de espacio, pero pueden despejarse fácilmente consultando el mapa del lugar.

Al enfrentarte a las misiones principales, no estás obligado a ir directamente al lugar donde tiene lugar el objetivo de la misión principal. En lugar de eso, siempre puedes volver a otras zonas exploradas y a la Guarida del juego para realizar misiones secundarias, cazar Escorias, mejorar el equipo, entrenar o simplemente explorar. Sí, puede resultar decepcionante para algunos debido al limitado espacio disponible para la exploración, pero aún así admiro el diseño de cada lugar y la interacción con los distintos personajes. Personalmente, no me sentí abrumado ni distraído por los grandes espacios.
En las zonas que requieren más exploración, las secciones se pueden recorrer fácilmente descubriendo obeliscos. Estos permiten al jugador viajar fácilmente de un obelisco a otro, siempre que esté activo. El mundo y los personajes cambian a medida que avanza la historia, por lo que es importante volver a visitar lugares cruciales como la Guarida para descubrir nuevos objetos en las tiendas, desbloquear nuevos objetos en la Herrería, encontrar misiones secundarias adicionales, participar en más interacciones con los NPC y mucho más.
En general, la exploración del juego, la búsqueda de zonas a medida que avanzaba mientras luchaba contra enemigos y jefes, incluidas las interacciones con el entorno y los personajes, me dejó satisfecho. Me ha gustado lo fácil que es utilizar los mapas del mundo y de las zonas, así como las cómodas y simplificadas funciones para viajar rápidamente.
El Sistema de Combate
Final Fantasy XVI destaca en tres áreas: la historia, los efectos visuales y sonoros, y el combate. Al empezar el juego, el ritmo de los combates puede resultar lento para algunos, pero tiempo al tiempo, ya que a medida que avances en la historia principal dispondrás de más opciones. Sé paciente, aprende las maniobras básicas y experimenta el viaje de Clive mientras despliega todo su potencial como hábil guerrero.
Clive tiene la capacidad de blandir diferentes poderes eikónicos, como se muestra en los tráilers, y aquí es donde brilla el combate. Sin duda, el combate me recordó a una combinación de juegos como Bayonetta, God of War o Devil May Cry. Puedes ejecutar diferentes combos que implican ataques cuerpo a cuerpo y habilidades, así como cambiar de Eikons sobre la marcha para desatar habilidades elementales únicas. La fluidez del combate mejora la experiencia, permitiéndome dar instrucciones a Torgal para que salte y ataque, cure y lance a los enemigos por los aires mientras utiliza simultáneamente combos de cuerpo a cuerpo y magia, acabando finalmente con ellos con un descarado remate de golpe mortal.
Durante las batallas contra jefes menores y mayores, me sorprendieron las suaves transiciones entre los combates y los momentos cinemáticos con Quick Time Events (QTE). La estimulante experiencia del combate Eikon contra Eikon, que recuerda a las batallas Kaiju, me hizo levantar la mandíbula del suelo. Los elementos del juego de rol de acción (ARPG) de esta entrega encajan a la perfección, y me sentí recompensado cada vez que esquivaba, paraba, escalonaba y ejecutaba combos a la perfección usando diferentes combinaciones de habilidades eikónicas.
El combate Eikon en Final Fantasy XVI desempeña un papel fundamental en el juego debido a sus impresionantes y majestuosas secuencias. Al encarnar a un Eikon, tendrás acceso a sus controles y mecánicas exclusivos. Por ejemplo, Ifrit es capaz de abalanzarse hacia el objetivo, asestar fuertes golpes y lanzar bolas de fuego a distancia, mientras que Fénix es ágil, vuela en el aire, esquiva los ataques y dispara una lluvia de llamas. Sin embargo, invocar o encarnar a un Eikon no funciona como en los juegos tradicionales de Final Fantasy, donde puedes invocar a estas poderosas criaturas en cualquier momento de la batalla. En su lugar, sólo ocurre en momentos cruciales del juego. Momentos, cabe decir, que son de lo más espectaculares que he jugado en toda mi vida.
Como ya he mencionado, tendrás que avanzar en la historia para desbloquear todas las capacidades de combate de Clive. Pero al principio del juego, los jugadores tienen acceso a un conjunto de habilidades de combate básicas y a las Habilidades Eikónicas del Fénix. Las habilidades en Final Fantasy XVI se desbloquean gastando puntos de habilidad (PH), que se adquieren derrotando enemigos y completando misiones. Puedes aprender estas habilidades y mejorar sus efectos o potencia «Mejorándolas» y «Dominándolas» a cambio de más PA. Por cada poder eikónico equipado, Clive puede elegir dos habilidades asignadas a los botones Cuadrado o Triángulo. Al pulsar R2 con Cuadrado o Triángulo, se desencadena la habilidad del Eikon. Estas habilidades tienen tiempos de reutilización y se recargan con cada uso.

Aunque el combate parece emocionante, tiene sus taras, y hay que decir que si vas bien de nivel, el juego se vuelve bastante fácil, al menos en el Modo Acción. Es importante tener en cuenta que tendrás que acostumbrarte a usar los combos de forma eficaz. Sí, es un ARPG, pero eso no significa que puedas limitarte a machacar botones y esperar lo mejor. Tuve que aprender a través del modo de entrenamiento y las constantes batallas que encadenar combos mientras das órdenes a Torgal y cambias entre Eikons requiere sincronización y conocimiento de la situación. La cantidad de combos que puedes realizar en tierra y aire es emocionante, y resulta refrescante verlos en un juego de Final Fantasy. El juego también incluye una serie de combos recomendados, que puedes ver en los detalles de la habilidad pulsando Triángulo, lo que facilita probar una gran variedad de movimientos y habilidades.
Como en cualquier otro juego de Final Fantasy, Clive tiene acceso a equipamiento como armas, armaduras y accesorios que mejoran sus estadísticas ofensivas y defensivas. Cuando desbloquees la forja, podrás pedir a Blackthorne que fabrique nuevas armas o refuerce las existentes para aumentar su nivel y sus estadísticas a cambio de materiales. También puedes comprar equipo y objetos a comerciantes generales como Caron. Aunque me hubiera gustado que añadieran algunos objetos cosméticos como trajes para cambiar la ropa de Clive o de los miembros del grupo.
En cuanto a los miembros del grupo, sólo puedes controlar a Clive y, a lo largo de la historia, se te unen distintos personajes que actúan como compañeros de IA en la batalla. Estos compañeros no se pueden controlar directamente ni cambiar entre ellos, sino que actúan por voluntad propia. Los compañeros de la IA no tienen barras de salud, lo que significa que no morirán, pero pueden recibir ataques que interrumpan sus acciones.
Sin embargo, tienes cierto control sobre el mejor compañero del juego, Torgal. Un sabueso que es tu fiel compañero la mayor parte del tiempo. Tiene acceso a tres movimientos: Mordedura, un ataque básico que puede usarse para alargar los combos; Curar, que recupera los PS de Clive; y Embestida, que lanza por los aires a los enemigos pequeños. Si Torgal acompaña a Clive durante la batalla, su nivel de vínculo mejora, aumentando la potencia de sus ataques y su efectividad en combate.
Mi única queja sería que estos compañeros de IA a veces reaccionan con lentitud cuando necesito que sigan atacando a un enemigo debilitado o incluso que ayuden a curar al grupo. También me gustaría poder personalizar su equipo para mejorar su eficacia en combate. Sin embargo, se trata de un problema menor que no afecta significativamente a mi experiencia en general. Espero que futuros parches o actualizaciones nos permitan controlar y personalizar a otros miembros del grupo, como en Final Fantasy XV y Final Fantasy VII Remake.
Contenido Secundario y Post-Game
Además de la campaña principal, Final Fantasy XVI ofrece una cantidad considerable de contenido secundario y postgame. Aunque no podemos revelar el número exacto de misiones secundarias disponibles en este análisis, hay un generoso número de ellas. También hay un modo «Arcade», cacerías de monstruos, coleccionables que encontrar y un modo Nueva Partida + que introduce nuevos desafíos:
- Misiones secundarias: A medida que avanzas en el juego, aparecen misiones secundarias marcadas con un signo de exclamación verde en el mapa de la zona. Estas misiones son importantes para tu viaje, ya que proporcionan información adicional, desbloquean características o mejoras y ofrecen recompensas útiles. Ciertas misiones secundarias pueden bloquearse temporalmente durante momentos específicos del juego y solo estarán disponibles después de avanzar en la historia principal.
- Coleccionables: La historia de Final Fantasy XVI es apasionante, y querrás estar al día de los acontecimientos. A medida que Clive progresa, puede interactuar con Harpocrátes para encontrar un compendio exhaustivo de la tradición de Valisthea. El compendio incluye información básica, personajes, geografía, historia y entradas anteriores de la ATL. Al compartir las historias de las aventuras de Clive con Harpocrátes, los Tomos se actualizan y se puede acceder a más temas a medida que aumenta el nivel del lore. El escondite también incluye un Orchestrion que proporciona música de fondo para el centro. La lista de temas se amplía a medida que adquieres más rollos de música completando misiones, comprándolos a mercaderes o encontrándolos como botín.
- Cacerías: A medida que avances en la campaña principal, desbloquearás el Tablero de Caza, donde podrás elegir entre un grupo de enemigos de élite, llamados Escórias, a los que hay que matar a cambio de cuantiosas recompensas. Estos enemigos únicos pueden ser difíciles de combatir, dependiendo de su rango, así que asegúrate de estar preparado antes de lanzarte a la caza.
- Monolito de Arete: El Monolito Arete se desbloquea a medida que progresas y ofrece elementos rejugables para perfeccionar tus habilidades de combate. La Sala sirve como modo de entrenamiento en el que puedes ajustar parámetros y probar distintos combos. El modo Desafío te permite repetir cualquier fase superada y te otorga una puntuación en función de tu rendimiento. La repetición de fases, al igual que el modo Arcade, te permite repetir una fase superada en el nivel actual para ganar puntos de experiencia (EXP) y obtener botines aleatorios. Finalmente, más adelante desbloqueamos la repetición de Ordalías, unas pruebas que nos sirven para desbloquear objetos únicos que mejoran las técnicas definitivas de nuestros Eikons.
- Nueva Partida Plus: Al completar el juego, tendrás la opción de iniciar una Nueva Partida Plus (NG+). En NG+, puedes conservar ciertos progresos y objetos de tu partida anterior, lo que te permite volver a experimentar el juego con más desafíos y ventajas, además de tener ya desbloqueado el Modo Final Fantasy.
Cabe destacar que las misiones secundarias y el contenido posterior al juego ofrecen la oportunidad de ganar puntos de experiencia, PH y objetos adicionales, que pueden ser beneficiosos para afrontar batallas más difíciles, optimizar las habilidades de Clive y desbloquear trofeos.
Diseño Artístico y Sonoro de Final Fantasy XVI
El diseño de Final Fantasy XVI es innegablemente bello y se adapta perfectamente a su ambientación medieval. A medida que exploraba distintas localizaciones, cada una me parecía única y me encontraba admirando los frondosos bosques verdes con fauna peligrosa, imponentes castillos medievales y ruinas con detalles impecables, bulliciosas ciudades rodeadas de puestos de mercado y pequeños pueblos tranquilos donde los ciudadanos vivían su vida. Incluso las zonas que una vez fueron vibrantes habían sido consumidas por la plaga, quedando sin vida.
Los personajes, incluidos los NPC, están bien trabajados y cada uno tiene su propio vestuario. Los dominantes se visten para reflejar sus personalidades y Eikons. Por ejemplo, Jill, la dominante de Shiva, viste una túnica de batalla discreta con toques azules, mientras que Benedikta lleva un atuendo más provocativo con detalles de plumas para representar al Eikon del viento, Garuda. La representación de los diferentes elementos mágicos es impresionante, con colores vibrantes que resaltan cuando se lanza la magia, haciendo que el combate sea visualmente muy satisfactorio.
El sonido es excepcional, gracias al trabajo del compositor musical Masayoshi Soken. La partitura orquestal que ha creado aumenta la adrenalina durante los combates y se adapta a los distintos lugares que exploramos. La intensa percuisión, los violines, los instrumentos de metal y las voces angelicales del coro se adaptan y crean tensión en función de lo que estemos haciendo, sumergiéndonos en la experiencia.
El doblaje del juego está disponible en varios idiomas: inglés, japonés, francés, alemán, italiano y español (latino). Al principio jugué con voces en japonés, pero me pareció molesto que las palabras no coincidieran con los movimientos de la boca de los personajes. El cambio al inglés me pareció más natural, pero tanto las voces en japonés como en inglés son de bella factura. Los actores interpretan espléndidamente a sus personajes.

Final Fantasy XVI es actualmente exclusivo de PlayStation 5 y ofrece la posibilidad de elegir entre el modo de rendimiento o el modo gráfico. Yo jugué principalmente en el modo de rendimiento por la acción trepidante y las escenas y efectos exagerados, buscando una experiencia fluida a 60 FPS. El modo gráfico, por otro lado, mejora la claridad visual con mayor calidad a expensas de una tasa de fotogramas de 30 FPS más baja, lo que puede afectar a la fluidez en las secuencias de batalla, al estar éstas muy enfocadas a la acción con movimientos muy rápidos.
Las transiciones entre combate, escenas y cinemáticas rápidas son perfectas. Los tiempos de carga son prácticamente inexistentes y los desplazamientos son casi instantáneos. En general, el juego funciona excepcionalmente bien, con el único problema menor de unos segundos de caídas de FPS durante alguna escena específica en alguno de los primeros capítulos. Sin embargo, creo que esto puede solucionarse con actualizaciones posteriores al lanzamiento, si no lo han hecho ya.
Según el director del juego, Hiroshi Takai, completar la historia princioal de Final Fantasy XVI lleva unas 35 horas, e incluir todo el contenido secundario y posterior al juego podría ampliar el tiempo de juego hasta las 70-80 horas. En mi caso han sido menos, alrededor de 50, a falta de rejugar toda la parte principal en el Modo Final Fantasy y conseguir todas las habilidades de los Eikons disponibles.
Reflexiones finales sobre Final Fantasy XVI
Al principio, tenía mis reservas sobre esta nueva entrega de Final Fantasy debido a mi preferencia por la mecánica tradicional de combate por turnos y a mis sentimientos encontrados hacia entregas anteriores como Final Fantasy XV, que se inclinaba hacia un enfoque de RPG de acción. Sin embargo, tras ver gameplays de la demo y probar el juego completo, mi perspectiva cambió. He aceptado la nueva dirección que Square Enix ha tomado para atraer a un público más amplio. Cosa que ya comencé a hacer con Final Fantasy VII Remake, aunque considero que tiene un mejor sistema de combate que Final Fantasy XVI.
Tanto si eres un nuevo fan de Final Fantasy como un veterano, te recomiendo encarecidamente este título. Final Fantasy XVI combina nuevas características con los elementos principales de la franquicia. Presume de un tono refrescante, más desenfadado y oscuro, con una narrativa que crea tensión constantemente y revela intrigantes revelaciones. La jugabilidad es muy satisfactoria, con diferentes tipos de secuencias de acción y una mecánica de combate fluida que aprovecha al máximo la potencia de PlayStation 5. Final Fantasy XVI se ha convertido en una de mis videojugos favoritos de la serie, conquistándome con su historia bien elaborada, sus fantásticos personajes y su impresionante jugabilidad.
Final Fantasy XVI
Pros
- Gran historia y desarrollo de personajes
- Clive, uno de los mejores protagonistas
- Artísticamente y técnicamente espectacular
- Sistema de combate adictivo
- Banda Sonora impresionante
Cons
- Los mapas están algo vacíos
- Es bastante fácil
- Algunas misiones secundarias sobran, así como algunas principales
- Caídas de FPS intermitentes
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